Estamos ya familiarizados con varios fenómenos morfosintácticos consistentes en el uso impropio de los pronombres «le», «la», «lo» y sus respectivos plurales. Lo que hoy veremos en este artículo es, pues, el origen y la historia del leísmo, del laísmo y del loísmo.
Errores de concordancia de los pronombres de objeto indirecto
En español es frecuente que se duplique el objeto indirecto. Es común que este complemento se anticipe con un pronombre de objeto indirecto lo más pegado posible al verbo, y ya, en cualquier otra posición dentro de la oración, se desarrolle el objeto indirecto propiamente dicho.
Algunas de las oraciones que hay a continuación están tachadas por contener algún error gramatical relacionado con la concordancia del objeto indirecto. Te propongo, estimado lector, que descubras cuál; la comparación con las frases no tachadas (y, por tanto, correctas) puede ayudarte.