En la famosa batalla de Hastings del año 1066, Guillermo el Conquistador invadió Inglaterra. En el imaginario colectivo, esto suele verse como la invasión francesa de Inglaterra, aunque, para ser más exactos, Guillermo era normando; de hecho, antes de la conquista era simplemente el duque Guillermo II de Normandía. (A partir de entonces, sería Guillermo I de Inglaterra).
Esto es importante. Los normandos (literalmente, los hombres del norte) eran realmente de origen vikingo, ya asimilados en Francia desde principios del siglo X, cuando Rollón el Caminante (tatara…buelo de Guillermo) se asentó en la tierra que sería llamada Normandía, al norte de Francia.
Francés normando y francés parisino
Los normandos de Rollón trajeron inicialmente su lengua nórdica, pero, para el momento de la conquista de Inglaterra, la lengua de Guillermo era ya una variedad del francés que podemos llamar (francés) normando.
En francés normando no se había palatalizado /k/ ante /a/; de ahí que de capitale > francés normando catel > inglés actual cattle ‘ganado’.
En cambio, en francés parisino-central (que se haría el estándar y tendría mucha mayor influencia en el préstamo de palabras hacia el inglés), /k/ sí palataliza ante /a/; de ahí que actualmente en inglés también exista chattel ‘bienes, enseres’ a partir del francés antiguo chatel.
Influencia en el inglés
Hasta mediados del siglo XIII, el idioma de las élites era lo que podríamos llamar anglo-normando. En esta época entran en el inglés palabras de origen normando, a veces creando una especie de dobletes como en el nombre de los animales (de origen inglés: los granjeros ingleses son quienes los crían) y el nombre de su carne (de origen normando: las élites normandas son quienes la comen):
- sheep ↔ mutton < moton < multone
- cow ↔ beef < buef < bove
- swine ↔ pork < porc < porcu
Sin embargo, a partir de la segunda parte del siglo XIII la corte prefería el francés parisino, dejando relegado el antiguo anglo-normando.
Pregunta 1
El inglés cat ‘gato’ está obviamente relacionado con el latín cattus (a su vez préstamo bastante tardío de origen desconocido: en latín no tardío, «gato» era feles).
El español «gato» y el italiano «gatto» revelan una forma alternativa gattus, mientras que el francés chat necesariamente desciende de cattus.
¿Por qué en inglés tenemos cat, y no chat o similar?
Respuesta
Según lo que sabemos, podríamos explicar el inglés cat, no chat, por ser la forma normanda sin palatalización, igual que cattle frente a chattel.
En este caso, sin embargo, una consulta en la bibliografía nos informa de que ya en inglés antiguo (antes de la invasión normanda) existía catt, por lo que la palabra estaba ahí desde antes (al menos desde el año 700).
Realmente, cat es simplemente un préstamo a partir del latín cattus. De hecho, parece ser que el latín cattus es el origen de la palabra para «gato» en la mayoría de las lenguas con esta raíz. O sea, que el latín no fue el inventor de la palabra, pero sí su difusor.
Reflexión sobre la respuesta
Podríamos haber pensado en una palabra común al protoindoeuropeo que simplemente se ha desarrollado de forma paralela en las lenguas germanas y en latín. Sin embargo, ya hemos dicho que en latín clásico no existía cattus, por lo que sería raro.
Pero lo más determinante es que, incluso suponiendo una raíz como p. ej. *kat‑ (de donde presuntamente cat y cattus), la ley de Grimm habría resultado en un inglés *hat (igual que p. ej. cornu ↔ horn). Esto descarta esta hipótesis indoeuropea.
Tal y como se ve en la bibliografía, es probable que la palabra sea de origen africano-asiático (no en vano los egipcios tenían domesticados a los gatos desde al menos el 2000 a. C.). No es este el sitio para entrar en la veracidad de que los griegos y romanos no tuvieran gatos como mascotas, sino comadrejas o animales similares (mustelae en general), pero sí es verdad que los diccionarios al uso traducen feles por «gato» (alguno especifica «gato no doméstico»), «marta», «comadreja»… y el Oxford Latin Dictionary (1968) dice (traducción mía) «cualquiera de los diversos carnívoros pequeños, probablemente incluyendo la marta, el turón y el gato salvaje» [Any of several small carnivora, prob. including the marten, polecat, and wild cat].
¿Se adoptaría la palabra cattus (¿siglo VI?) para llamar específicamente al gato frente a otros animales similares cuando el gato comenzó a ser mascota frecuente? Y… ¿realmente el gato no era frecuente, si parece haber constancia de gatos domésticos en Grecia en 1200 a. C., y los griegos, fenicios, cartagineses y etruscos los difundieron por el sur de Europa, lo cual hubo de pasar aún antes de Cristo?
Pregunta 2
El nombre Charles /tʃɑɹlz/ en inglés procede del francés Charles < carolus, actualmente pronunciado /ʃaʁl/; en francés no existe /tʃ/.
De forma análoga, el inglés chain /tʃeɪn/ procede del francés chaine < catena, actualmente pronunciado /ʃɛn/.
¿Cómo se explica la diferencia de pronunciación de la grafía ‹ch› entre el inglés y el francés?
Respuesta
El inglés tomó el nombre del francés cuando ‹ch› aún representaba /tʃ/ (entre el siglo V y el XII). Como en inglés el fonema /tʃ/ aún existe, no ha cambiado la pronunciación desde entonces.
En cambio, en francés /tʃ/ se desafricó en el siglo XIII, lo que resultó en /ʃ/.
Naturalmente, cualquier préstamo que el inglés tomara del francés a partir del siglo XIII, o tome en el presente, será con /ʃ/. Esto explica la pronunciación de chef /ʃef/ ‘cocinero, jefe de cocina’ (¿desde 1842?) frente a chief /tʃif/ ‘jefe, líder’ (desde la Edad Media).
Pregunta 3
El inglés cavalry ‘caballería’ y chivalry ‘caballerosidad’ están lógicamente relacionado con el étimo latino caballu.
Ambas formas fueron tomadas del francés:
- cavalry /ˈkævəlɹi/ < cavalerie (siglo XVI)
- chivalry /ˈʃɪvəlɹi/ < chevalerie (Edad Media)
Según todo lo que ya sabemos, ¿cómo podemos justificar la diferente pronunciación del primer sonido?
Respuesta
La forma chivalry se justifica fácilmente por ser un préstamo en que el dígrafo francés ‹ch› ya se pronunciaba /ʃ/.
La dificultad reside en explicar el propio francés cavalerie (el inglés cavalry no es más que un reflejo más o menos fiel del francés). Según lo que sabemos, deberíamos haber tenido chevalerie, igual que tenemos cheval ‘caballo’.
De hecho, en francés existió y aún existe chevalerie, pero con el sentido de ‘caballerosidad’, no de ‘caballería’. Para mantener separados ambos significados, para el último se tomó en préstamo el italiano cavalleria, donde no hay ni cambio de vocal ni palatalización. (Por supuesto, en el momento del préstamo del italiano por el francés, /k/ ya no se palatalizaba, por lo que se conservó tal cual).