El mundo de la etimología es cosa a veces difícil y oscura, pero siempre interesante y agradecida. Existen, y siempre han existido, las etimologías populares y existen, por supuesto, las etimologías que no permiten duda alguna. Entre uno y otro extremo hay etimologías dudosas, y de una de ellas es de lo que vamos a hablar ahora mismo: la etimología de «secta». Comencemos con la definición del DLE:
1. f. Doctrina religiosa o ideológica que se aparta de lo que se considera ortodoxo. Rechazan que una secta se equipare a una religión.
2. f. Conjunto de seguidores de una secta. La secta de los esenios.
3. f. Comunidad cerrada, que promueve o aparenta promover fines de carácter espiritual, en la que los maestros ejercen un poder absoluto sobre los adeptos.
Empezamos de lleno con la manzana de la discordia: la segunda acepción indica que una secta se refiere al conjunto de seguidores; la primera, a la doctrina que se aparta —esto es, se secciona— de otra.
Contenidos del artículo
Etimología de «secta»: ¿de «seguir» o de «sección»?
De una manera más clara —pues, además, no es sensato proponer etimologías a partir de significados actuales—, la disputa de los etimólogos en torno a esta palabra es si el sustantivo «secta», del latín sectam, proviene…
- de la raíz indoeuropea *sekʷ‑ > latín sequor ‘seguir’, o…
- de la raíz *sek‑ > latín seco ‘cortar’, de donde el español «segar», «segmento», «sección», «sector», etc.
Reflexiones sobre lo que dicen algunas webs
Buscando por internet, encontramos en los primeros puestos tres webs en español que hablan de la etimología de «secta». El artículo de elcastellano.org hay que desecharlo porque cae en una absurda confusión de ambas raíces. La Wikipedia española no se moja y sale del paso aportando vagamente las dos posibilidades. En la entrada de etimologias.dechile.net se inclinan por la raíz *sekʷ‑.
En todos los casos se afirma o se insinúa, en fin, que el sustantivo latino secta proviene de una variante (¿femenina, neutra plural?) del participio secūtus [seˈkuːtus]. Esto, en un primer momento, es extraño, ya que implicaría que en secta se ha perdido una vocal larga y acentuada, que es precisamente la más resistente —prácticamente invulnerable— a cualquier proceso fonético-fonológico, mucho más a una síncopa (desaparición). Sin embargo, este participio, aunque es el que se estandarizó, es solo analógico a otros paradigmas, siendo el participio original *sectus; además, tenemos otras palabras como sector ‘el que persigue (ávidamente)’ sin esa u.
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Qué dicen los libros gordos
Por otra parte, A Latin Dictionary (Lewis & Short) afirma categóricamente que proviene de seco y lo razona como que secta es la sustantivación resultante cuando se sobrentiende el sustantivo via; la cosa queda bastante confusa. Este masivo diccionario es de 1879, por lo que es mejor pasar a su sucesor, el Oxford Latin Dictionary (1968), que empieza la entrada de secta, ‑ae diciendo que es el femenino de un participio obsoleto de sequor.
Por último, veamos lo que dice el Dictionnaire étymologique de la langue Latine – Histoire des mots de Ernout-Meillet, aunque tampoco es precisamente reciente. Este diccionario dice que secta se relaciona a menudo con sequor, pero que los romanos tendían más bien a relacionarlo con seco, sin apartarse de la noción de sequor; que secta podría derivar más bien del frecuentativo verbal sector ‘perseguir (con afán)’, como en este ejemplo de El soldado fanfarrón de Plauto (91):
ait sese ultro omnis mulieres sectarier.
dice además que todas las mujeres lo andan persiguiendo.
Reflexiones sobre ejemplos de textos clásicos
Si siguiéramos el razonamiento de hablantes de lenguas modernas, la frecuente aparición en los textos latinos del sustantivo secta con alguna forma verbal de sequor podría indicar que se trata de un juego de palabras en los que se emplean dos palabras parecidas pero no relacionadas:
inter Stoicos et Epicuri sectam secutos pugna perpetua est, regaturne providentia mundus (Quintiliano, Instituciones oratorias 5.7.35).
entre los estoicos y los seguidores de la secta de Epicuro hay una eterna disputa sobre si el mundo está regido por la providencia.quo magis tuum, Brute, iudicium probo, qui eorum philosophorum sectam secutus es (Cicerón, Bruto 120).
por ello apruebo, Bruto, tu decisión, porque has seguido la secta de estos filósofos.
Sin embargo, hay que tener en cuenta que los romanos (y los griegos) eran muy aficionados a la figura etimológica, recurso que en las lenguas modernas tiende a percibirse como bastante pesado.
¿Conclusión?
Yo era partidario de la etimología de «secta» < seco, pero, después de la investigación, creo que no se puede desmentir ninguna de las dos opciones. Por tanto, mi conclusión es ecléctica y tampoco termino de mojarme: en «secta» subyacen las ideas de «seguir» y la de «sección».
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