Mientras le estoy enseñando latín a algún principiante, aprovecho la primera vez que nos sale el verbo habeo para soltarle una eficaz —aunque falaz— regla mnemotécnica: habere significa ‘tener’, igual que en inglés el verbo have o en alemán haben.
¿Casualidad?
Como vamos a ver, comparar raíces indoeuropeas en español e inglés es, además de curioso, muy útil.
Como decía, esta regla mnemotécnica es eficaz pero falaz, porque se incurre en un falso cognado: realmente, la similitud de habere con have/haben es casual, ya que las respectivas raíces indoeuropeas son completamente distintas. En este punto, si el alumno muestra interés, le explico alguna cosa sobre cómo comparar raíces inglesas (germánicas) con raíces españolas (latinas).
¡Echa un vistazo a este vídeo para ir abriendo boca!
Contenidos del artículo
Falsos cognados vs. falsos amigos
No me quedo tranquilo sin explicar, ante todo, la diferencia entre falsos cognados y falsos amigos, términos muy relacionados y que suelen mezclarse hasta el punto de que los anglosajones suelen emplear false cognate y false friend indistintamente.
Boletín de lenguas para linguófilos
Un correo diario con contenidos e historias filológicas y lingüísticas. No es el típico boletín tostón: a los miles de suscriptores actuales les encanta.
(El artículo que estás leyendo no se cierra: no perderás la posición de lectura, así que apúntate al boletín ahora mismo y enseguida podrás seguir leyendo).
Como resumen, podemos decir que los falsos cognados son aquellos que, como habere ↔ have/haben, parecen tener la misma raíz, pero que realmente no tienen relación etimológica, incluso si su significado es el mismo; es decir, el hecho de que signifiquen lo mismo y de que además se parezcan bastante es pura casualidad.
Los falsos amigos, por contra, pueden ser cognados verdaderos o falsos cognados. En cualquier caso, el significado en las dos lenguas en cuestión es distinto. Un ejemplo de falsos amigos a partir de cognados verdaderos lo tenemos en el inglés pretend ‘fingir’ ↔ español ‘pretender’; son cognados verdaderos porque ambas palabras proceden del latín praetendere ‘poner algo por delante → poner una excusa; pretender (= querer algo)’, aunque en cada lengua ha pervivido un significado distinto.
Ejemplos (bastante pedestres) de falsos amigos a partir de falsos cognados serían fin ‘aleta’ ↔ «fin» (= «final»), sin ‘pecado’ ↔ «sin» (= contrario de «con»), etc.
Raíces indoeuropeas evolucionadas al inglés y al español
El inglés, aunque pasado por un considerable filtro francés y latino, es una lengua de origen germánico. Como se sabe, el español es una lengua romance, es decir, descendiente del latín.
A su vez, el latín y la familia germánica son ambos descendientes de la reconstruida lengua protoindoeuropea, es decir, que ambas lenguas tienen un antepasado común, por lo que es de esperar que muchas palabras tengan un mismo origen, como por ejemplo las pertenecientes a las relaciones familiares.
Introducción a las lenguas indoeuropeas
En este punto hay que aclarar la diferencia entre dos casos:
- El inglés ha tomado una palabra directamente desde el latín, por lo que su forma y significado son bastante parecidos. (Estamos hablando de un préstamo-cultismo).
- Una misma palabra indoeuropea ha sido heredada por ambas lenguas desde el principio, por lo que esa misma palabra ha evolucionado en cada lengua siguiendo los procesos evolutivos propios de cada una de esas lenguas.
La diferencia entre ambos casos es más o menos análoga a —dentro del propio español— la que hay entre un cultismo y una palabra patrimonial, respectivamente. En este artículo vamos a hablar del segundo caso.
Evolución del protoindoeuropeo a las lenguas germánicas
Aquí vamos a resumir y simplificar mucho, hasta el punto de que vamos a explicar una sola ley fonética, la primera mutación consonántica del germánico, más conocida como ley de Grimm: Jacob Grimm no solo se dedicaba a recopilar cuentos de hadas junto con su hermano, sino que además fue un reputado lingüista.
Según esta ley, las consonantes oclusivas indoeuropeas (que por lo general se mantuvieron tal cual en latín, salvo las aspiradas, como veremos en los ejemplos) mutaron al evolucionar a la familia germánica. Es posible que el fenómeno comenzara cuando las oclusivas sonoras aspiradas indoeuropeas perdieron la aspiración, tal que así:
- */bʰ/ > /b/
- */dʰ/ > /d/
- */gʰ/ > /g/
El problema es que ahora las antiguas */b, d, g/ indoeuropeas se confundían con los nuevos sonidos procedentes de */bʰ, dʰ, gʰ/ tal y como acabamos de ver. Esto habría causado que las */b, d, g/ primarias indoeuropeas también cambiaran:
- */b/ > /p/
- */d/ > /t/
- */g/ > /k/
¿Y el problema ahora? Efectivamente: las antiguas */p, t, k/ indoeuropeas se confundían con los nuevos sonidos procedentes de */b, d, g/ según lo recién visto. Por tanto, las antiguas */p, t, k/ indoeuropeas también habían de cambiar:
- */p/ > /f/
- */t/ > /θ, ð/
- */k/ > /h/
Por supuesto, entre el siglo I d. C. (momento en que se calcula que estos cambios tendrían lugar) hasta el siglo XXI ha habido muchísimos otros cambios consonánticos y vocálicos, pero la ley de Grimm nos da suficiente juego.
En el siguiente vídeo tienes información en mayor profundidad sobre la ley de Grimm:
Comparación de palabras inglesas de origen germánico con españolas de origen latino
El español también tiene una buena cantidad de cambios respecto al latín, por lo que la comparación será más clara entre el inglés y el latín (con su correspondiente o palabra relacionada española al lado).
Leyendas medievales 🎙️ el pódcast
Suscríbete gratis en tu plataforma favorita para descargar los nuevos episodios en cuanto se publiquen.
Beowulf, Roncesvalles, Guillermo Tell, Robin Hood…
Según los cambios vistos en la ley de Grimm, tenemos las siguientes palabras que remontan a una misma raíz indoeuropea:
*/d/ > /t/
- indoeuropeo *déḱm̥ > inglés ten < †tehn ‘diez’ | latín decem ‘diez’
- indoeuropeo *dn̥ǵʰwéh₂s > inglés tongue ‘lengua’ | latín lingua ‘lengua’ (aquí el latín, extrañamente, cambia /d/ por /l/; quizá análogo a la alternancia de «des‑odor‑ante» ↔ «oler»; sí hay algún rastro de la forma originaria dingua)
*/g/ > /k/
- indoeuropeo *gel‑ > inglés cold ‘frío’ | latín gelu ‘frío’ (cf. «gélido», «glacial»; italiano gelato ‘helado’)
*/p/ > /f/
- indoeuropeo *peysḱ‑ > inglés fish ‘pez’ | latín piscis ‘pez’ (cf. «piscifactoría»)
- indoeuropeo *pl̥h₁nós > inglés full ‘lleno’ | latín plenus ‘lleno’
- indoeuropeo *ped‑ > inglés foot ‘pie’ | latín pes, pedis ‘pie’ (cf. «pedal», «pedicura»)
*/t/ > /θ, ð/
- indoeuropeo *tréyes > inglés three ‘tres’ | latín tres ‘tres’
- indoeuropeo *ph₂tḗr > inglés father ‘padre’ | latín pater ‘padre’
- indoeuropeo *bʰréh₂tēr > inglés brother ‘hermano’ | latín frater ‘hermano’ (cf. «fraternal»)
*/k/ > /h/
- indoeuropeo *ḱḗrd‑ > inglés heart ‘corazón’ | latín cor, cordis ‘corazón’ (cf. «cordial», «recordar», «acordar»)
- indoeuropeo *ḱwṓn > inglés hound ‘perro (de caza)’ | latín canis ‘perro’ (cf. «canino»)
(Nota: ignoremos la diferencia entre /k/ y /ḱ/).
*/bʰ/ > /b/
- indoeuropeo *bʰer‑ > inglés bear ‘llevar, soportar’ | latín fero ‘llevar’ (cf. «transferencia»)
*/dʰ/ > /d/
- indoeuropeo *dʰwṓr > inglés door ‘puerta’ | latín foris ‘puerta’ (cf. «fuera», «foro»)
- indoeuropeo *(h₁)rewdʰ- > inglés red ‘rojo’ | latín ruber ‘rojo’ (cf. «ruborizarse», «rúbrica»)
*/gʰ/ > /g/
- indoeuropeo *weǵʰ- > inglés wagon ‘carro’ | latín veho ‘transportar’ (cf. «vehículo»)
(Ignoremos nuevamente la diferencia entre /gʰ/ y /ǵʰ/).
Como se ve, los tres últimos casos son más confusos en latín que en inglés, ya que las aspiradas indoeuropeas evolucionan de forma diversa y poco reconocible en latín. Tampoco hay ejemplos de */b/ > /p/ porque la */b/ era muy infrecuente en indoeuropeo.
¿Qué pasa con habere y have?
Como decíamos al principio, el latín habere y el inglés have, aunque se parecen y significan lo mismo, no proceden de la misma raíz indoeuropea.
Los cursos de latín y griego antiguo desde cero incluyen todas las explicaciones gramaticales que puedas necesitar. No es un simple manual de gramática: son contenidos organizados lógica y gradualmente y explicados en vídeo. Lo mejor de los cursos es la enorme cantidad de prácticas graduadas de análisis, traducción, declinación, conjugación, etc. ¡Infórmate!
Según hemos visto, podemos entender que el inglés have (y el alemán haben) procede de una raíz indoeuropea *keh₂p-, que es por cierto la misma del latín capere ‘coger, tomar, capturar’ (cf. «capturar», «cautivo» < captivum; italiano capire).
Por su parte, el verbo latino habere (de donde «haber») procede de una raíz indoeuropea *gʰeh₁bʰ- (ya vimos que las aspiradas indoeuropeas evolucionan de forma rara en latín), que significa ‘coger, tener, sostener’. Es posible —aunque probablemente no— que sea la misma raíz del inglés give ‘dar’.
Como se ve, los dos verbos proceden de raíces indoeuropeas distintas; a pesar de ello, guardan bastante relación semántica una con otra.
¡Por cierto! Puedes seguir aprendiendo y disfrutando en mi boletín diario: cada día envío un correo donde comparto artículos, recursos, vídeos, pensamientos y reflexiones, todo relacionado con la filología, la lingüística... en fin, todo eso que nos gusta a ti y a mí. Es gratis, pero solo para auténticos linguófilos.